
Por Huenumil Caniqueo
Representantes mapuche rechazan propuesta unilateral del gobierno chileno y llaman a establecer una Comisión Paritaria Estado-Pueblo Mapuche basada en el derecho internacional y los tratados históricos.
Cerro Ñielol, Temuco – 29 de mayo de 2025. En respuesta al anuncio presidencial realizado en cadena nacional el pasado 21 de mayo, donde el mandatario Chileno Gabriel Boric presentó la “Implementación del Informe por la Paz y el Entendimiento”, se desarrolló este jueves 29 de Mayo de 2025 la Cumbre Mapuche de Emergencia en el Cerro Ñielol, convocada por el Movimiento por la Autodeterminación, diversas Comunidades Mapuche y el Consejo de Todas las Tierras.
En la ocasión, los representantes mapuche expresaron su rechazo a lo que consideran una “iniciativa unilateral” por parte del gobierno chileno, que busca cerrar el conflicto sin desmantelar las estructuras de ocupación territorial ni modificar el modelo económico extractivista vigente en Wallmapu.
“La paz no se impone desde el Estado ni desde informes técnicos sin consulta vinculante. La autodeterminación del Pueblo Mapuche es un derecho, no una concesión”, señalaron en la declaración firmada por múltiples representantes territoriales desde comunas como Loncoche, Arauco, Galvarino, Panguipulli y Melipeuco, entre otras.
Exigencia de fondo, no de forma
Una de las principales críticas formuladas por la Cumbre apunta a los “reconocimientos constitucionales simbólicos” que, según afirman, han sido utilizados históricamente por los Estados de América como mecanismos de control colonial más que como garantías de derechos. En este contexto, proponen un texto concreto para ser incorporado en una eventual reforma constitucional:
“El Estado de Chile reconoce al Pueblo Mapuche y su derecho a la libre determinación, su cultura en el ámbito tangible e intangible, su tierra, territorio y recursos, en base al Parlamento o Tratado de Tapihue.”
Este artículo busca consagrar no solo la existencia del Pueblo Mapuche, sino también su derecho a ejercer soberanía política, jurídica y territorial en sus espacios ancestrales, de acuerdo con los estándares del derecho internacional, incluyendo la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y la Declaración Americana adoptada por la OEA.
Tratado de Tapihue, hoja de ruta para un nuevo trato
La Cumbre también hizo un llamado explícito a retomar el camino de los tratados, recordando que los parlamentos establecidos entre el Pueblo Mapuche y el Estado chileno en el siglo XIX, como el Tratado de Tapihue de 1825, constituyen antecedentes jurídicos y políticos válidos.
En base a ello, se propone la creación de una Comisión Paritaria Estado-Pueblo Mapuche, con un mandato específico para la implementación del Tratado de Tapihue. Esta comisión tendría como objetivos prioritarios:
- Buscar soluciones estructurales al conflicto territorial.
- Implementar procesos de restitución de tierras y recursos.
- Establecer un mecanismo permanente de diálogo político, con garantías internacionales.
Tiempo político y voluntad real
Los representantes mapuche también advirtieron que el actual gobierno, cuyo mandato concluye en marzo de 2026, “no dispone del tiempo ni de la legitimidad necesaria” para impulsar un proceso de reforma constitucional efectivo sin una amplia consulta nacional e internacional.
“El conflicto entre el Estado de Chile y el Pueblo Mapuche no se resuelve con buenas intenciones ni con soluciones de escritorio. Se requiere de un marco jurídico vinculante, basado en la libre determinación y en la historia política entre ambas partes”, concluyeron.La declaración lleva la firma de Aucan Huilcamán (Consejo de Todas las Tierras), así como de dirigentes y representantes de diversas comunas del Wallmapu, reafirmando la unidad del movimiento mapuche en su demanda por justicia, autonomía y reparación histórica.