Ante una información publicada en el portal de Bio Bio el día 7 de noviembre y sobre la base del derecho a réplica considerado en nuestra legislación, hago llegar a ustedes una nota que aclara lo expresado bajo el título “ONG Campo Seguro llama a Conadi a no comprar fundo de Chilterra que está tomado en Paillaco”.
Ervin Guentrepan, presidente del sindicato de Chilterra, empresa de capitales de Nueva Zelanda, China y Chile, señaló que la información emitida falta a la verdad y responde a “intereses de una ONG fantasma que solo busca anular al pueblo mapuche de cualquier intento de progreso y paz”.
“Primero que todo hablan de tierras. Esto es más que tierras. Chilterra es una empresa que está funcionando, cien por ciento operativa, pese a la situación. Hoy el foco de los propietarios es la búsqueda de una salida que asegure la continuidad operativa y evite la pérdida de empleos con el daño económico que podría producir”, destacó.
Protección del trabajo
El representante sindical aclaró que su organización, junto a comunidades mapuche, trabajan en la zona en una “ocupación productiva” y no en una “toma” como dice la entidad. Esto busca el bienestar y el desarrollo económico sostenible en base a una colaboración estrecha entre comunidades, trabajadores y empresarios.
“Nos sorprende leer que esta empresa solo busca ser adquirida por la Conadi. No es así. La venta es abierta. Prueba de ello es que hubo un fondo canadiense que mostró interés en el proyecto. Pero tristemente, cuando ese fondo vino a conocernos, el veedor que estaba antes no los recibió”, denunció.
Guentrpan enfatizó que “nosotros estamos trabajando en el marco de la ley, manteniendo la operación de la empresa de manera responsable y respetuosa. Aquí nadie ha venido a usurpar nada; hemos preservado los empleos y la producción, y cualquier interpretación que hable de ‘usurpación’ solo busca desacreditar el trabajo que hacemos, sin tener ninguna representación ni conocimiento directo de la realidad de nuestro esfuerzo”.
Sobre la supuesta participación de comunidades de otras regiones, en el trabajo productivo actual, el dirigente señaló que “lo que más llama la atención es que hagan esa afirmación. Aquí en el sur de Chile hay empresas internacionales comprando tierras: tenemos una gran empresa lechera de capital neozelandés, empresas holandesas, japonesas, y nadie pone reparos. ¿Vamos a restringir entonces que chilenos de otras regiones inviertan en nuestro propio territorio? Esto sí que es absurdo y absolutamente discriminatorio. Además, las comunidades interesadas representan el interés de muchas personas que tienen una conexión histórica y cultural con estas tierras, y no deberían ser cuestionadas”.
siniestras motivaciones
Por último, Guentrepan se refirió al propósito de las comunidades ancestrales que buscan que esos terrenos sean vendidos a Conadi. Esto -a juicio de vocero sindical- es una solución que ciertos grupos ven en forma crítica, ya que no consideran a los mapuche como fuerzas capaces de producir en una clara discriminación.
“En esta zona es de público conocimiento que muchos agricultores vinculados a Colún, titulares de sendos beneficios tributarios, han vendido sus campos a través de Conadi Recientemente, la familia del exdiputado de Renovación Nacional Diego Paulsen vendió tierras por la misma vía en La Araucanía. Todos lo han hecho sin que se levantara ninguna polémica. Entonces, ¿por qué en este caso particular se cuestiona el derecho de Chilterra a vender sus tierras? La diferencia resulta llamativa y lleva a reflexionar sobre posibles motivaciones detrás de esta disparidad de criterios”, puntualizó.